LE PROVOCA ASCO, Y ROMPE ESCULTURA

Un licenciado en Bellas Artes rompe una figura del IVAM

"Me provocaba algo, me daba asco", declara el autor de los daños a la escultura valorada en 80.000 euros



IGNACIO CABANES VALENCIA Un licenciado en Bellas Artes ha sido detenido por la policía, acusado de un delito contra el patrimonio artístico, por romper una escultura del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) en la madrugada del pasado domingo. La pieza dañada, que se encontraba en el exterior del museo situado en la calle Guillén de Castro de Valencia, está valorada en 80.000 euros, según ha podido saber este periódico.
El autor de los daños, un hombre de 32 años, natural de Tenerife, declaró ayer a Levante-EMV después de quedar en libertad con cargos que "había tomado un par de cervezas esa noche" y que fue a tocar la escultura y, cómo vio que se movía, la tiró al suelo. El arrestado aseguró que está muy arrepentido por lo sucedido y que nunca se imaginó que dicha escultura pudiera tener tanto valor.
"Si es una cosa tan cara no sé por qué la tienen ahí fuera", se justificó el implicado, quien añadió que la escultura debería haber estado vigilada por alguien o con unos sensores de movimiento. "Puede ir cualquiera y se apoya, como el que toca una farola, y la tira al suelo", alegó.

Trasfondo artístico
Sin embargo, el trasfondo de la cuestión parece ser otro. "En la actualidad no dejan exponer a artistas jóvenes en este tipo de museos", criticó el autor de los daños argumentado en parte los motivos que le llevaron a tirar la escultura. "Me provocaba algo, me daba asco", reconoció el acusado al ser preguntado sobre el porqué de su acción.
La obra de arte atacada representa la figura de un hombre vomitando agua de cara a una pared. Hace dos semanas, este diario publicó una foto señalando que el líquido inundaba la terraza.
El acusado, tinerfeño y residente en Valencia, se encuentra actualmente en el paro después de trabajar como profesor. Según explicó, esa noche había salido a tomar unas copas en compañía de un amigo, y al pasar por la calle Guillén de Castro, alrededor de las cuatro de la madrugada, la tomó con la escultura tirándola al suelo. "No estaba afianzada en el suelo, me apoyé y se cayó", alegó el detenido.
No obstante, las cámaras de videovigilancia del IVAM grabaron al acusado golpeando la escultura, con patadas y empujones hasta que la consiguió tirar, según apuntaron fuentes conocedoras de los hechos. El arrestado, que ha quedado en libertad con cargos a la espera de juicio, podría enfrentarse a una pena de uno a tres años de prisión por un delito contra el patrimonio artístico.


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